sábado, 22 de diciembre de 2012

Desde pequeño siempre he soñado en tener familia y tener una mujer a la cual querría con todo mi ser... Y al parecer, si sigues conmigo, lo lograré.

No quiero acabar como las parejas convenientes y pasajeras que ensucian la sociedad y a la gente bajo mi punto de vista. No quiero llegar a decir ningún día "Yo estuve con esa". Quiero llegar a decir "Ella es mi chica y estoy orgulloso" Y aun que eso ya lo diga, espero poder seguir diciéndolo por mucho tiempo. Quiero poder mirarte dentro de unos años y darte la mano igual que te la doy ahora, sintiendo lo mismo y sonriendo igual, y créeme, por mi parte, siempre va a ser así.

¡Diablos! voy en serio, quiero que seas la futura madre de mis hijos. No me precipito al decir que estoy dispuesto a pasar el resto de mi vida contigo. Ya he encontrado la pieza que me faltaba, tengo lo que necesito y estoy muy feliz contigo.
Debo agradecer que me dieras la oportunidad y no haberte rendido, porque estamos así gracias a ti. Gracias a tu "bocaza", que tanto me gusta. Siempre he adorado que hables conmigo y me cuentes tus cosas. Siempre he adorado que me mires con esos ojos que no tienen nada de especial pero son tuyos, y ese color que, como ya dije, roza el ámbar.

Recuerdo cada momento de nuestra relación, todos esos recuerdos agradables que me producen esa sensación de nostalgia y felicidad. Momentos que no deberían perderse. Una de las cosas que más me gustan es dormir junto a ti, mirarte a la cara y poder acariciar tus mejillas y quedarme idiotizado mirando tus labios. Pequeños placeres que nunca perderé. También adoro cogerte de la mano por la calle o en cualquier parte, pero es una sensación muy agradable. Tocarte el pelo o acariciar tu espalda es uno de mis entretenimientos favoritos, si es que se le puede llamar así. Es triste que no pueda sostenerte mucho tiempo en brazos, pero confío en que llegará un día en el que pueda hacerlo sin apenas esfuerzo. Te quiero mucho.

AVISO: Es más que seguro que tengamos discusiones en las cuales te pongas furiosa y te molestes conmigo por cosas que a lo mejor ni me doy cuenta y no lo hago intencionadamente. No es mi intención herirte ni hacerte sentir mal, simplemente, soy tonto y no puedo remediarlo. Es verdad que te dije que iba a intentar cometer los menos errores posibles, porque para eso estoy, corregir esos pequeños fallos que cometo sin darme cuenta, tales como la ausencia, compararme contigo o ser soberanamente pesado. Son cosas muy normales y típicas en una pareja, pero no por ello se tiene por qué apagar lo nuestro. Es lo último que yo quisiera. Es cierto que cada vez que te molestas conmigo... lo pasas mal, pero deberías ver como me siento yo.... creo que un pedazo de mierda tendría más privilegios y se sentiría mejor. No quiero discutir contigo, pero va a ser inevitable y cien por cien superable. No hay problema que se nos venga encima y no podamos afrontarlos. Serás orgullosa, todo lo que tú quieras, y es verdad que no es nada bueno, pero cada cual tiene sus errores y defectos, y por ello te voy a comprender, entenderé que me voy a tener que dar cuenta de lo que hago por terceros. Pasarán cosas de estas, y cuando seamos mayores y estemos juntos, nuestros malos momentos peleas y discusiones se verán eclipsadas por nuestros buenos momentos. Nuestros actos tendrán repercusión, nuestras palabras quedarán grabadas y los recuerdos, en nuestra memoria.

Espero que en ningún momento de la vida veas esto como una condena porque... ya dije que no quería ser tus cadenas, sino tus alas. No por mi serás esclava ni prisionera, no te verás oprimida de ninguna manera. Serás libre y expresarte libremente es lo que te pido.

Solo te pido una cosa; acompáñame en este camino de la vida, caminemos de la mano siempre y prometo quererte, cuidarte, mimarte y ser pesado para siempre entre otras muchas cosas.
En ningún momento te soltaré, siempre iré de tu mano, incluso cuando no lo parezca.

Te quiero mucho, gracias por haberme dado esta oportunidad.

Gracias, siempre tuyo.